¿Qué significa el dinero para ti? Usarlo mal, de cualquier forma, nos afecta, nos limita las posibilidades y arrastra, sin que podamos evitarlo a todos los que nos rodean. A algunos solo los empobrece financieramente. A otros los desgarra hasta hacerlos pobres en todo.

Desde cualquier punto en que nos situemos,  los temas  relacionados con dinero tienen repercusión en nuestra psicología. Nuestras  decisiones financieras no siempre están basadas en los conocimientos que poseemos, la mas de las veces, responden a nuestros valores personales, de los que se desprenden compromisos asumidos desde las emociones, sin dejar de lado la presión social, ejercida desde nuestro entorno.

En la medida en que no tenemos suficientes conocimientos de lo financiero, el componente emocional suele ser mayor, aunque existe en todo el mundo en menor o mayor grado.

Regularmente los  economistas parten de la premisa de que los consumidores bien informados, podrán analizar adecuadamente  sus opciones financieras y que eso  les permitirá tomar las decisiones más racionales, acorde a sus intereses. Esta definición teórica acerca de este ser lógico y racional se  denomina “Homo œconomicus” (hombre económico).

Pero nada es más distante de la realidad que esto. Todos  tomamos decisiones que nos perjudican, que van en contra de nuestros intereses y sabiendo que no son las mejores de las decisiones nos aferramos a la idea de que contra todos los pronósticos, nos ira bien.

La realidad contradice esta idea. A pesar de  los principios de la seguridad financiera que nos impone: Gasta menos de lo que ingresas, ahorra para el corto y medio plazo, invierte para el futuro,desconfía de ofertas demasiado buenas… es probable que todo se nos olvide frente a lo que entendemos como “una gran necesidad”, o un “gusto” que creemos que merecemos.

Deberíamos contar con programas de educación financiera desde los primeros cursos de educación básica, que tengan como objetivo mejorar nuestra aptitud para  tomar decisiones financieras a lo largo de nuestras vidas y fomentar conductas positivas relacionadas con el ahorro y la gestión del dinero.

La economía conductual estudia nuestro comportamiento con respecto al dinero. Reconoce que somos seres emocionales, frecuentemente irracionales, yque nuestras decisiones financieras no están guiadas solamente por la lógica, el razonamiento y el análisis, sino por emociones y prejuicios.

Hay que entender cómo nuestra competencia financiera está ligada a valores personales de identidad, seguridad, tranquilidad, familia, independencia, orgullo y autoconfianza, etc.

En nuestra próxima entrega hablaremos acerca de cómo nuestra actitud ante el dinero condiciona nuestros hábitos.